domingo, 23 de junio de 2013

AFRONTAR LAS DIFICULTADES DIARIAS

Pensar de forma positiva te ayuda a construir una actitud que te otorgará fortaleza para afrontar las dificultades diarias. Ser optimista te ayuda a superar los obstáculos con facilidad, pues te permitirá concentrarte en tus fortalezas. A veces resulta complicado ver el lado positivo de la vida, así que si necesitas un poco de ayuda para ver los problemas como una oportunidad de cambio y crecimiento, leer estos pensamientos positivos puede servir para levantarte el ánimo.
  La felicidad es una actitud. Puedes decidir ser miserable, o levantarte con la firme convicción de ser feliz y trabajar hacia esa meta.
Si hay algo que te hace infeliz, cámbialo. Si te es imposible cambiarlo, siempre puedes cambiar tu actitud ante esa situación.
Los retos y las dificultades son las que hacen la vida interesante; superarlos hacen la vida llena de significado y profundidad.
Los problemas son una oportunidad para que encuentres tu verdadera fortaleza interior. Nada puede enseñarte tu verdadera fuerza como superar una dificultad.
No son los éxitos o las posesiones materiales las que determinan la felicidad, sino la actitud que tienes frente a la vida. La felicidad es una decisión y un estado mental.
 La clave para desarrollar tu potencial no está en los logros, sino en la fortaleza desarrollada frente al esfuerzo contínuo para superar las dificultades.
Si crees en tí mismo entonces ya tienes la mitad del camino hacia éxito recorrido.
Tener fe no es sinónimo de creer en una religión, tener fe es saber que cada paso que das te lleva a ser la persona que deseas ser.
No es la inteligencia ni el dinero lo que te lleva al triunfo, sino la certeza de que posees la constancia para alcanzar tus metas.
Los pensamientos negAtivos no son más que ideas, y las ideas siempre se pueden cambiar.
Tienes el poder para hacer de tu vida lo que desees y transformarla en pos de tu felicidad.

EL MEJOR MOMENTO DE SER FELIZ ES AHORA

Los seres humanos estamos acostumbrados a condicionar la felicidad, creyendo que ésta
depende de determinadas circunstancias externas. De este modo, dices que serás feliz
cuando consigas pareja y te cases. Cuando consigues pareja y te casas, dices que serás
feliz cuando tengas hijos. Cuando llegan los hijos, dices que serás feliz cuando crezcan…y
así vamos posponiendo la felicidad para un futuro que nunca llega o, cuando se cumplen
las condiciones, nos imponemos otras nuevas. De este modo creamos un círculo vicioso de
insatisfacción y exigencias, sin entender jamás que el mejor momento para ser feliz es el
presente.



La felicidad no consiste en tener o ser determinadas cosas, ni tampoco depende
completamente de lo que esté pasando en tu vida, pues ser feliz es cuestión de actitud.
Aprender a disfrutar el presente, el aquí y el ahora es lo único que necesitas para
experimentar un cambio radical en la vida; pues cuando te enfocas en tu presente, no le das
fuerza a los sucesos tristes del pasado ni te llenas de ansiedad ante un futuro incierto. Vivir
el aquí y el ahora te otorga la suficiente amplitud de pensamiento para permitirte aprovechar

las oportunidades que se presentan en forma de retos. Por más oscuro y difícil que parezca
el panorama, siempre hay una salida. Sólo necesitas tener confianza y fe en tus capacidades
para resolverlas y eso sólo se consigue viviendo el presente.

La felicidad no es una meta concreta, la felicidad reside en el camino que transitas día
día; así que atesora los momentos que vives cada día, tómate un minuto contar y agradecer
tus bendiciones, disfruta cada instante que pasas junto a personas especiales y aprovecha el
momento presente. Recuerda, para ser feliz sólo necesitas desearlo y cambiar tu actitud por
una más positiva, enfocada al momento presente.